Quienes se dedican a las nulidades matrimoniales en Oviedo saben que, en ocasiones, hay parejas que no se conforman con la separación o divorcio civil. Como consecuencia de que uno de los dos miembros de la pareja desea casarse de nuevo por la iglesia, u otros motivos, se quiere solicitar la nulidad matrimonial.

En el caso en que se desee la nulidad religiosa del matrimonio, hay que tener en consideración que la declaración de la misma le corresponde a los tribunales eclesiásticos. Esos valorarán si existen motivos suficientes para considerar nula la unión. No el 100 % de los las solicitudes de nulidades matrimoniales en Oviedo son respondidas positivamente. Por ese motivo es recomendable buscar asesoramiento profesional.

Existen tres tipos de causas de nulidad: de capacidad, de consentimiento y de forma.

Las primeras incluyen el incumplimiento de aquellas capacidades personales del individuo que se consideran obligatorias para contraer matrimonio. Por ejemplo: no tener edad suficiente o estar ya casado. Además, no puede existir parentesco entre los contrayentes, ni estar el hombre ordenado como obispo, sacerdote o diácono. En este sentido también se consideran nulos los matrimonios entre personas de distintas religiones o disparidad de cultos. También es motivos de disolución haber atentado contra la vida del cónyuge anterior al del otro contrayente.

Las causas relativas al consentimiento incluyen aquellas en las que uno de los contrayentes no tenga uso de razón suficiente como para consentir el matrimonio por voluntad propia, o uno de los cónyuges haya sido obligado a la unión por cualquier método.

Los fallos de forma incluyen la falta de uno de los testigos, no haberse celebrado el matrimonio presencia de un párroco o delegado, o que se trate de un matrimonio celebrado por poderes nulos.

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